Ensayos Mesosemestrales

Primera Parte, Ensayo I
En muchos sentidos, el amor de leyenda entre Hernán Cortés y su concubina indígena, la Doña Marina, es una metáfora del descubrimiento de América y la dualidad del encuentro entre los dos mundos: la de Europa y la de América, porque cada uno tuvo su propia belleza y produjo civilizaciones avanzadas.
Cortés la amaba a la Malinche y, a la vez, se la aprovechó de ella para cumplir la conquista de su tierra. Igualmente, ella aprendió la lengua española, desempeñó como una intérprete azteca-español, ayudándole a Cortés en la conquista como si fuera traidora a su pueblo, pero por su alianza con los españoles dio a la luz hijos productos de las dos culturas. Asimismo ella se convirtió en nada menos que la creadora de la raza mestiza en el nuevo continente, siendo según la leyenda: “la Madre de México”.
La dualidad. Lo bueno y lo malo. El descubrimiento resultó tanto en la creación de grandes edificios, como el consumo de las religiones indígenas en la misma época. Cada civilización contaba con logros singulares en los campos del arte, la arquitectura y la ingeniería, la matemática, la ciencia, entre otras cosas. Y cada civilización fió y alentó a la cultura de la otra. El cubismo del arte gravado de los mesoamericanos se encuentra en las pinturas de Miró y los retratos de Picasso. Y la introducción del caballo en América impulsó un crecimiento significante en las economías de los pueblos indígenas de América.
Primera Parte, Ensayo II
Entre las varias profecías y creencias religiosas de los mesoamericanos, los aztecas esperaban que el díos Quetzalcóatl regresara en la forma de un hombre del extranjero. Al tener conocimiento de este mito, Hernán Cortés se aprovecho de la oportunidad de presentarse como un díos que merece la tributa de la corte de Moctezuma y el pueblo de Tenochtitlán.
En el arte gravado en piedra de los artesanos azteca, hay varias representaciones de Quetzalcóatl. Entre ellos, una fue de un hombre extranjero—barbado y blanco. Es por tales imágenes de su deidad principal (en el aspecto como figura humana), que los azteca creyeron que Hernán Cortés era Quetzalcóatl.
Esta profecía convino a Cortés en el caso de México y le permitió negociar con los aztecas en lugar de matarlos en batalla. No obstante la conveniencia de esta ventaja política, los conquistadores no respetaron a las manifestaciones de las religiones indígenas y, de pronto intentaron de reemplazarlas con símbolos de la fe cristiana.
Los españoles trajeron al Nuevo Mundo la salvación de cristo y la genocida por cuenta de la viruela. Al llegar a las orillas del continente americano, los españoles continuaban una tradición tanto imperialista como evangelista—semejante a la Inquisición. En los ojos oscuros de los conquistadores, las religiones indígenas de América fueron paganas e inhumanas. Realizaron grandes esfuerzos—a veces bastante crueles—para destruir o convertir los templos y santuarios de las religiones paganas y, a la vez, efectuar la conversión de los indígenas a la cristiandad. Sin embargo, en conjunto con sus clérigos y cruces, los conquistadores trasladaron de España, sin intentarlo, una fuerza de igual o aún mayor consecuencia: la viruela. Se estiman que entre 90 al 95 por ciento de la población indígena de Latinoamérica se fallecieron por la viruela y otras dolencias procedentes desde Europa.
Segunda Parte
Pregunta A
Todos los países hispanoparlantes de América luchan hoy en día con los mismos desafíos socio-económicos: siéndose la pobreza, la disparidad social y la corrupción oficial. En parte por la instabilidad política y además por su herencia colonial que aprovechaba con sistemas tal como “la encomienda” a los países latinoamericanos, la región ha experimentado dificultad en poner en marcha sistemas racionalistas u ordenados para dirigir sus economías.
En su lugar, florecen atajos, tales como “la palanca” para adelantar procesos, “la mordida” para obtener accesos y permisos, hasta “la muestra” para exhumar un condenador de flete fuera del almacén aduanal. Todos los expuestos costumbres sociales han formaron a fin de navegar burocracias gubernamentales y comerciales que no funcionan bien, menos sí para aquellas personas de pocos recursos financieros o de piel oscura.
Pregunta B
La trayectoria de la historia de España, o mejor dicho, de la Península Ibérica, ha sido un calidoscopio de culturas manifestándose por una serie de conquistas e inmigraciones abarcando civilizaciones europeas, asiáticas, beréberes y árabes. La primera invasión fue por parte de celtas desde el norte. Luego los fenicios, pues los cartagineses, y después los griegos se establecieron colonias en las costas. Siguiendo al año 200, la mayor parte de la Península, hasta el interior inclusive, comenzó a formar parte del creciente Imperio Romano.
La nacionalización de la España actual se realizó el reino visigodo a partir del quinto siglo, hasta el año 711 cuando la primera invasión de musulmanes llegó desde el norte de África. Por los próximos ocho siglos, o sea, durante la Edad Oscura en el resto de Europa, los reinos moros de “Al-Andaluz” produjeron una cultura diversa y tolerante que se aprovechaba de muchos avances científicas, artísticas y culturales incorporando lo mejor de cada uno de los tres religiones principales del pueblo, es decir, el Islam, el judaísmo y, sobre todo la cristiandad.
Pregunta C
La corrida de toros es un espectáculo contemporáneo que tiene sus raíces en las batallas de los gladiadores actuadas en los coliseos del Imperio Romano. La corrida simboliza, a la vez, la lucha y la dependencia en las poderosas fuerzas de la naturaleza. Dentro de los límites de la corrida, el toro y el torero son dos mitades de una composición equilibrada e integrada: son el coraje y la gracia, son el acero frío de la espada y la sangre caliente del enemigo y, sobre todo, simboliza la muerte y el bravo encuentro actuado por el torero frente a ella.
Pregunta D
La presencia de los romanos en la Península Ibérica introdujo una afinidad para construir grandes ciudades y también la redes de carreteras y acueductos para integrarlas, así permitiendo la fácil reubicación e inmigración de diversos pueblos y la mezcla de culturas las cuales han sido caracterizadas la civilización española en los siguientes siglos hasta la actualidad, y que duplicaron los conquistadores cuando llegaron al Nuevo Mundo.
Pregunta E
La historia ha nombrada al Rey Alfonso X “el Sabio” debido a que en tiempos llena de tensiones sociales y políticas entre las diversas religiones de España, siendo los cristianos, los judíos y los moros de la fe musulmano, el fue un monarca sumamente culto y en sí actuó como un defensor de la tolerancia entre dichos tres religiones, y las contribuciones a la sociedad española de cada uno de ellos.
Alfonso X contaba con un profundo interés en la historia, la ciencia y los artes finos, y durante su monarca fundió una escuela de traductores en Toledo donde académicos judíos, cristianos y musulmanes rescataron textos de la antigüedad tales como los comentarios de Aristóteles, textos sobre la astronomía y la medicina, entre otros, que permitió al renacimiento filosófico y científico en la Europa medieval.
Pregunta F
Cuando Fernando de Aragón casó con Isabel de Castilla se unieron dos grandes y ricos reinos, y la pareja luego conocida como los Reyes Católicos empezó “la Reconquista” de España, unificando el territorio que sería la España moderna. Dentro del dicho reino unido, los Reyes Católicos impulsaron fuertes controles sociales semejantes a una “ley marcial”. En 1476 estableció la Santa Hermandad, que era la primera policía estatal de Europa.
Los controles internos de los Reyes Católicos extendieron al esfero religioso, realizado por la Inquisición española para que haya cumplir la pureza de la fe. A nombre de la Inquisición, los judíos fueron torturados y luego expulsados, el último resultando en una crisis económica para España. La misma póliza se aplicaron hacia los musulmanes, o sea, convertirse al cristianismo o salir de España.
Al completar la unificación de una España cristiana, pusieron en marcha una política expansionista, no hacia sus vecinos europeos, sino hacia el Mediterráneo y también dándole apoyo a Cristóbal Colón, que permitió la expansión externa en América y giró el curso de la historia mundial.
Pregunta G
En la fe azteca, el universo es dualista y el supremo díos en su panteón es de dos aspectos: el Quetzalcóatl y el Tezcatlipoca. Quetzalcóatl es la fuerza creativa mientras Tezcatlipoca es el aspecto maléfico, la forma de Quetzalcóatl—el serpiente plumado—representa la índole dualista que los azteca comprenden como la esencial condición humana—un cuerpo físico unido con aspectos espirituales sin límites.
Pregunta H
¿Por qué no existe ningún monumento público al conquistador Hernán Cortés en México? Se encuentra la repuesta a la presente en un antiguo dicho latinoamericano que sigue, “América del Norte fue fundado por peregrinos y América del Sur fue fundado por piratas”. La intención de España en México no fue solamente de colonizarlo sino conquistarlo y robarlo de su supuesta riqueza de plata y del oro a través un sistema de terrorismo social y trabajo forzado para los aztecas y otros pueblos indígenas. Por lo expuesto, tener un monumento a Cortés en México sería como erigir una estatua de Adolfo Hitler en Israel.
Pregunta I
Cuando Hernán Cortés llegó en la Península de Yucatán encontró a una esclava nacida de la clase alta de la sociedad azteca pero capturada por los maya de la región durante uno de las numerosas guerras entre las dos civilizaciones indígenas. La llamó la Malinche (nombrada Doña Marina por Cortés, “Malintzin” por otros) y ella fue una de 20 esclavas regaladas a Cortés por los caciques de los maya.
La Molinche fue bilingüe en el náhuatl de los aztecas y también la lengua de sus amos los mayas. De pronto el índole oportunista de Cortés convirtió a la Malinche en interprete entre los azteca y un naufragado español rescatado por Cortés, Jerónimo de Aguilar, que hablaba español y maya. A paso la Malinche aprendió la lengua español y Cortés se la convirtió por ser su concubina. Según leyenda, la Malinche dio la luz al primero mestizo, y por ella que se conoce como la “Madre de México”.
Pregunta J
De pronto después del inicio de la conquista, Hernán Cortés observó que existía resentimiento y una fuerte preocupación hacia los aztecas por los pueblos indígenas en la Península de Yucatán los cuales se conocían como los Tlaxcala. Lo que no observó fue que uno de sus soldados que trajo a Tenochtitlán llevó con él la viruela. Sin defensa ninguna contra la viruela, un organismo microscópico que llegó a las Américas por los conquistadores a través de un esclavo africano, mató al emperador, casi la totalidad de sus soldados, y un 25 por ciento de la civilización azteca. Al mismo tiempo, con la ayuda de la Malinche, Cortés fue bien informado sobre los planes del azteca, y el papel de ella fue tan central en los éxitos militares de los conquistadores como la despoblación accidental por causa de la viruela. Aprovechando los conocimientos de la Molinche en las costumbres políticas y en el campo de batalla de los indígenas, Cortés y los soldados bajo su mando manipularon tanto a los Tlaxcala como los aztecas en Tenochtitlán como si fueron piezas de ajedrez. De primero Cortés negoció una alianza con los Tlaxcala, pero luego los traicionó y los obligó a desempeñarse como labor esforzado al igual como hizo a los aztecas.